Follow my blog with Bloglovin escapology: cuando nos cierran el chiringuito

cuando nos cierran el chiringuito

Hoy me he levantado con el pie izquierdo. Mañana tendré cuidado y miraré bien dónde y con qué extremidad piso al despertarme; pero hoy ya no hay remedio.
Y estoy enfadada. Lo que pasa es que estoy enfadada y con razón.

Todo trata sobre mi castillo. Un castillo de arena que estoy construyendo en la playa. Estoy invirtiendo todo mi tiempo, todas mis ganas y mi ilusión. Eso sobretodo, tengo una ilusión que se desborda, más que las olas del mal al romper en la orilla.
Todos los días trabajo un poquito en él: hoy un foso, mañana una almena...

El problema es que no siempre dependemos sólo de nuestro trabajo, y me cierran el chiringuito. (Olvidadlo, no es una metáfora sobre un trabajo en una empresa que cierra. No, no. Y que cada uno se lo interprete como quiera)
Se trata de mi castillo, en el que tanto he trabajado, en el que tantas ilusiones he puesto, eligiendo la arena con cuidado, seleccionando la playa en la que tenía que estar, diseñando cada uno de sus elementos y pensando un futuro para él.

Pero ahora, tengo que ir a comer, y si el chiringuito está cerrado me quedo sin energías y no voy a poder seguir con mi castillo.

¿Y qué hago?
¿Voy a otra playa? Quizá mi construcción se estropee por el camino y nunca vuelva a ser lo que fue.
¿Aguanto hasta que lo abran? A lo mejor la reapertura del chiringuito llega demasiado tarde y el castillo ha sido alcanzado por el mar.
¿Empiezo otra construcción nueva? Una jaima, o unos cines...

A veces elegir contra las cuerdas nos deja KO; nos deja sin respiración e inmóviles porque el pánico nos invade.

Otras nos armamos de fuerzas ante la injusticia, sabiendo que también nos merecemos esa ensalada y el mojito de mediodía. Y aunque mi pie izquierdo ha sido el primero en pisar la arena de esta playa por la mañana, por suerte, no estoy sola y una buena amiga, desde París, me ha dicho:
"Montemos nosotras un chiringuito"

Y así, es como voy a seguir construyendo mi castillo. 
Con perseverancia y buscando el merendero merecido, no lejos de mi playa ni de mi castillo, y si es necesario, me llevaré el tupper de casa.

Feliz miércoles. (Mañana será otro día)

9 comentarios:

  1. Yeahhhh! Alicia ¡esa es la actitud!

    Me ha encantado leerte, me he visto muy reflejada con tu texto y tu metáfora (es que yo soy muy de comparar todo con todo) siempre hablando de cosas que creo que la gente entiende de qué hablo pero a veces no (me gusta ese misterio) :-))))

    Me encuentro como tú con mi castillo, mi arena, mis proyectos y toda esa ilusión que invierto día a día. La palabra que queda de fondo siempre es PERSERVERANCIA y mucha paciencia, dar forma a nuestros sueños cuesta "un huevo" pero está más que claro que somos valientes y tenemos objetivos claros. Si desde París llega una ayuda bienvenida sea ¡qué mejor que rodearse de otra persona más! Dicen que la unión hace la fuerza ¿no?

    Ánimo con el día la ensalada y el mojito del mediodía lo tenemos más que merecidooooo!!!!

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    1. si si, como una fábula, que cada uno le da su lectura.
      Me alegro de verte por aquí! Estás invitada a compartir un mojito siempre que quieras :)

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    2. Oooohhhhh lo acepto encantada adoro los mojitos y estas conversaciones.
      Pasa un buen fin de semana ;-)

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  2. Buena reflexión! yo también le pongo muchas ganas a mi castillo, y hay que seguir luchando, día a día..
    buen fin de semana!

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    1. claro! para que no se desmorone!
      Ya verás qué alto y robusto nos queda ;)

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  3. Lo mejor es montar un chiringuto sin cimientos, como una mesa que te la llevas a cualquier parte cuando sube la marea. Porque la gente se empeña en elevar construcciones demasiado altas, pero es mejor estar ahí abajo, sintiendo como las olas te lamen los pies.
    Besos y ¡para mí una cañita bien fría!

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    1. mmmmmm... me gusta la idea. A lo mejor le pongo unas ruedas para facilitar el transporte y poder acercarme a la orilla sin que se deshaga.
      Hasta que consiga moverlo... ahí va una caña y platito de olivas!

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    2. Pues yo...llego tarde porque he estado muy desconectada ((o muy ocupada, que es más cierto) pero no por eso me voy a quedar sin comentar...

      Yo opino como Idoia oye, que te cierran aquí...pues te vas para allá, que hace más solete en el otro lado...pues cambio, que te cae un chaparrón o una ola fuerte...pues te esperas a que esté semi seco y vuelta a empezar.

      Que eso de quedarse esperando a que te vuelvan a abrir suena muy pero que muy feo!

      un besazo

      P.

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    3. Oye! Rebienvenida! que no, que no, que nunca es tarde... ni para montarnos un chiringuito :)
      Ya sabes que tú estás invitadísima! Beso

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Gracias por tus palabras!

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